A vos, mama. (Feliz cumpleaños, amor de mi vida)

Siempre te reis cuando te digo que mis tesoros mas apreciados son las cartas que te escribo. Que soy demasiado guerrera para ser tan cursi. Pues, como no escribirte a vos si fue tu corazón mi primer tambor de guerra.
En este día especial quiero agradecerte. Si, a vos mama por darme la vida y por enseñármela. Por evitar que jugara con alfileres para no pinchar los globos que me comprabas. Por intentar curarme las heridas de las rodillas con besos y las del corazón también.
Por enseñarme el valor de las cosas y no su precio. Por no decirme "Te lo dije" cuando pasaba lo que me habías dicho que iba a pasar. Por llevarme en brazos cuando estaba cansada y por darme abrazos cuando mi alma lo estaba. Por haber intentado quitarme las rueditas de la bicicleta y de mis miedos, por no cortarme las alas y por haberme dado un lugar donde volar. Por no volverte loca cuando yo estaba de todo menos cuerda, por ser mi salvavidas, mi musa, mi ángel de la guarda, mi ejemplo a seguir y por sobretodo ser mi madre y mi padre a la vez.
Por no dormir por esperar a que llegara a casa, por quitarte la campera aun teniendo vos frio y dármela a mi para que me tapara. Por hacer de cocinera, psicóloga, medica, jueza y veinte mil oficios mas. Por cubrirme el plato para que no se enfriara si tardaba en comer y por cubrirme a mi cada vez que me acostaba, dándome un beso de buenas noches después. Por estar ahí cuando ni yo misma estaba, por demostrarme que las promesas se cumplen y no solo se hablan y por matar los monstruos que estaban debajo de mi cama y de mi mente.
A vos mama, por no soltarme la mano cuando todos los hacían. Por intentar comprar pegamento a las cinco de la mañana para reparar mi corazón. Por hacer guardia toda la noche cuando me enfermaba y después disimular que no estabas cansada.
A vos, mama por simplemente todo y aun mas. A mi, únicamente por estar orgullosa de ser tu hija.

Feliz cumpleaños mami. Te amo.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

La muerte se enamoro de ella.

Abuela, como desearia que fueras eterna.

Miedo al vértigo.